¿Cuáles son los puntos clave a la hora de elaborar un proyecto?

Escribe: Dra. Analia Vanesa Louro

En mi condición de contadora pública, muchas veces me consultan sobre la elaboración de proyectos para el ámbito público y privado, donde el objetivo ya está predeterminado. En este punto es donde detecto la primera dificultad, ya que no se plantea una problemática a solucionar que justifique la planificación.

Muchos proyectos son elaborados con una idea que no proviene de una dificultad clara a solucionar, y además surge que tampoco fue previamente analizada en profundidad. El evaluador entonces deberá corroborar que la justificación de la problemática tenga los elementos necesarios para que la solicitud de financiación encuentre sustento.

La clave es tener un buen planteo inicial del proyecto, redactarlo de forma simple y fácil de comprender, para que nos ayude a nosotros como formuladores y que más tarde sirva como guía para poder dar respuesta a las preguntas que surjan en la etapa de evaluación.

Teniendo en cuenta estas consignas, a la hora de comenzar el armado del perfil de un proyecto debemos primero Identificar el problema que nos llevó a pensar en su elaboración, identificando las ideas y las posibles alternativas de solución. Luego hay que definir los objetivos, relevar el escenario de situación en el momento cero y arrancar con el estudio técnico de las alternativas.

Lo más recomendable es planificar el armado del diseño del proyecto dividiendo en etapas y elaborar un plan para cada una de ellas. Teniendo en cuenta que una buena identificación del problema es determinante para lograr un resultado positivo, hay que partir desde allí para establecer toda la estrategia que implica la preparación.

Es importe aclarar que un problema no es un proyecto. El error común a la hora de identificar el obstáculo es  confundirlo con la falta de determinado medio. Esto lleva a crear soluciones que no resuelven el problema de fondo. Un ejemplo podría serla falta de hospitales o de camiones recolectores de basura. En el caso de que en un municipio o ciudad determinada no hay la suficiente infraestructura hospitalaria, la problemática podría ser que existan grandes distancias entre los centros de atención primaria de la salud. Y en el segundo ejemplo, una baja cobertura en la recolección de residuos.

La primera pregunta a hacerse es:¿Por qué? Necesitamos entonces priorizar los problemas e identificar las causas y los efectos. En este punto propongo una herramienta, que es el Árbol de problemas, al que se podría agregar un segundo con los objetivos.

Tomando uno de los ejemplos planteados, si partimos de que el problema es la “baja cobertura en la recolección de residuos”,podemos determinar primero las causas. Podría ser una inadecuada infraestructura para el tratamiento de residuos domiciliarios, o bien la alta generación de ese tipo de basura o la deficiente gestión municipal. A cada una de estas causas podrían seguirles otras relacionadas.

Este análisis nos permite identificar todas las alternativas hacia dónde dirigir la solución que se desarrollará como medio para lograr el objetivo del proyecto. En un mismo curso de acción podemos potenciar los recursos, seleccionando la alternativa más viable de acuerdo a los que tenemos disponibles.

Una vez que determinamos las causas que constituyen la raíz de nuestro árbol, comenzamos a trabajar las ramas, que estarán definidas por los efectos de las causas plasmadas. Y siguiendo con el ejemplo de la falta de camiones recolectores podemos encontrar los siguientes efectos: deficiencia en la recolección, quejas constantes de los vecinos, acumulación de residuos en lugares públicos, más gastos locales y una consecuente pérdida de calidad de vida, más los peligros que la situación conlleva para la salud pública.

Este análisis nos permitirá generar alternativas de solución, convirtiendo cada una de las causas en medios y cada uno de los efectos en fines.

Esta herramienta resulta clave en la elaboración de proyectos, ya que brinda la solución a todas las respuestas que puedan surgir en el futuro para justificarlo.

Otra herramienta útil una vez determinada la problemática es responder las siguientes preguntas: ¿Qué se va hacer?, ¿Por qué se va hacer?, ¿Para qué se va hacer?, ¿Cuánto se quiere hacer?, ¿Dónde se va hacer?, ¿Cómo se va hacer?, ¿Cuándo se va hacer?, ¿A quién va dirigido?, ¿Quiénes lo van hacer?y¿Con qué se va costear?

Como verán en mi opinión y de acuerdo a mi experiencia, al éxito, tanto para obtener buenos resultados en la evaluación de terceros sobre el proyecto como para garantizar que el mismo se concrete, se basa en un buen planteo de la problemática a solucionar desde su formulación.

Dra. Analia Vanesa Louro

Bibliografía:

  • “Como Elaborar un Proyecto: guía para diseñar proyectos sociales y culturales” Ezequiel Ander-Egg María José Aguilar.
  • Metodología general de identificación, preparación y evaluación de proyectos de inversión pública Edgar Ortegón Juan Francisco Pacheco Horacio Roura. Instituto Latinoamericano y del Caribe de Planificación Económica y Social – ILPES. Área de proyectos y programación de inversiones. Santiago de Chile, agosto del 2005

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